Siento tu aliento vivo dentro de mi cuerpo.
Tu olor sabe a besos que desde el cielo chocan, en forma de vida,que esta un poco loca.
Me visitas cada día desde que no te tengo, estas en mi pleno.
Huelo tus caricias que hay en el recuerdo.
Desde mi infancia hasta estos momentos, que estaban llenos de secretos.
Te añoro, pero me visitaras cada mañana.
Para despertar mi alma.
Lazos que nunca podrán romperse, ni por el tiempo, ni por no poder verte.
El buen Padre.
Y ahora noto en el aire tus caricias, me dicen con sus palabras.
Se fuerte y continua, que los cuerpos se convierten en ceniza, pero su aroma perdura.
Dedicado a una persona muy especial en mi vida, mi Padre, te querremos allá donde estés. Besos de tu mujer, hijos y familia
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